JERUSALÉN, Israel – Un pastor libanés que cree que Dios le salvó la vida milagrosamente durante la catastrófica explosión de Beirut en agosto dice que el Señor todavía está obrando milagros en la ciudad destruida.
CBN News habló con el pastor Said Deeb of Life Center Church en Beirut días después de la explosión. El pastor Deeb dijo que sobrevivió debido a una «corazonada del Espíritu Santo».
Antes de que la explosión atravesara el puerto de Beirut, lo invadió una sensación inquietante y el pastor Deeb ordenó a todo el personal de la iglesia que se fuera a casa.
“Les dije a todos, ‘Vayan a casa, vayan a casa, simplemente cierren el Centro’”, explicó el pastor Deeb. “Era como si el Espíritu Santo estuviera diciendo: ¡Vayan! ¡Vamos! ¡Vamos! ¡Vamos! Entonces, estaba diciendo que todos se fueran a casa, apagaran las computadoras, los obligaba a irse, los estaba obligando «.
«Ellos pensaban que había perdido la cabeza, pero no lo sabían y yo no sabía que era el impulso del Espíritu Santo».
Esa decisión probablemente salvó innumerables vidas. No mucho después de que el pastor Deeb cerrara las puertas de la iglesia, una explosión masiva sacudió Beirut, matando a 200 personas e hiriendo a más de 6.500. Life Center Church, que está a solo una milla del epicentro de la explosión, sufrió daños significativos por la explosión. Nadie resultó herido excepto un guardia de seguridad.
“Todo lo que construí en 12 años; Lo vi destrozado en el suelo. Todos los techos en el suelo, todas las lámparas, todos los cuadros, todo. Todas las puertas, puertas sin marcos ”, dijo a CBN News.
Los jóvenes de la iglesia y los vecinos vinieron para ayudar a limpiar los escombros y proteger el edificio de los saqueadores. Hoy, después de mucho trabajo, gran parte de la iglesia parece nueva. Los vidrios rotos se han ido, las puertas nuevas se colocan en sus bisagras y los techos están nuevamente en su lugar.
El pastor Deeb dice que Dios lo protegió y ahora está usando su ministerio para obrar milagros en las vidas de los que sufren en Beirut.
“Ahora estamos tratando de llegar a las familias que nos rodean que perdieron sus trabajos, perdieron sus hogares, perdieron la esperanza. Es imposible sobrevivir sin esperanza”, dijo a Mission Field Media.
La explosión de Beirut dejó a unas 300.000 personas sin hogar en un país ya paralizado por una crisis económica, disfunción política y la pandemia de coronavirus.
Life Center Church está alimentando a los hambrientos, reparando hogares y pagando el alquiler de los necesitados.
«Estamos dando un poco de esperanza y creo que esta esperanza iluminará su fe y un día esta fe les dará el milagro que necesitan», dijo el pastor Deeb.
“Muchas gracias por orar por el Líbano, orar por la iglesia aquí. Gracias por el cuerpo de Cristo en todo el mundo ”, agregó. “Sigan orando por el Líbano. Creo que vendrá el milagro y vendrá el gran avance. Tengo esta fe. Por eso me quedo en el Líbano «.
